viernes, 20 de enero de 2012

Escucha tu puta cabeza, APÓCRIFO:

Hijo de puta de puta de puta.

Un tiro frente a un río,
un océano frente a una idea.

Más muro para el pueblo;
Más muro hecho de pueblo.

Come puño, come alma
traga sangre como sable.

Y otro mes que los conservadores
crucifican a Cristo para después
usarlo como estandarte de su moral,
ya se sabe, es más fácil arrepentirse
que dar un pequeño paso para el cambio
como bien decía Él:

"Alabados lo pobres porque de ellos será
el Reino de los Cielos."


...repite el Papa salivando desde un palacio
con oro en sus dedos, Arte en sus muros
y negocios millonarios en sus pies
¿verdad, Opus Dei?

Hijos de puta de puta mierda.

Bebed de mi vino, comed de mi pan
y quitadme el trabajo desde pateras que se hunden
tras alambradas de mil metros espinos.

Hijos de puta de puta millones
que se pelean por un aparcamiento en hora punta.

Vivan los valores familiares:
de sonreír sin ganas,
de increpar por la espalda,
de llorar a solas
y carroñear herencias.

¡Putos hijos de puta!

¿A quién miras mal, negro?
¿Te crees Dios, puto blanco?

Y una soprano llora desconsolada
porque le han destrozado la boca
a mil patadas con punta de hierro
pero...
"Lo hicimos por diversión"
–dicen riendo entre acné.

No las escuches, ¡fóllatelas!

Son todos unos cerdos
pero quedamos como amigos,
se enamore quien se enamore.

Y Dios dijo:
"Hágase la luz"
y el tachón se hizo...
Al fin y al cabo
los libros sagrados
los escriben seres humanos.

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